Este país se ha convertido en la fábrica del mundo. Las más grandes empresas (incluso de marcas americanas y europeas) se encuentra en China, su desarrollo es indiscutible. Utilizar el chino mandarín en sus negocios significa una puerta a un sinfín de proveedores o clientes y nuevas oportunidades para comerciar y ganar dinero.

Si bien muchos hombres y mujeres de negocios en China se esfuerzan por estudiar inglés, lo hacen no por gusto sino por necesidad, y es por ello que tampoco lo hablan muy bien. Es por eso que hacer negocios en inglés con chinos, lleva frecuentemente a malentendidos y a transacciones carentes de claridad.

Al hacer negocios con chinos, lo mejor es hacerlo en chino mandarín, el idioma que ellos utilizan a diario, porque hace posible tener mucha más claridad en los términos de las transacciones, forjar mejores relaciones de cooperación y camaradería, e incluso le permitiría ganar preferencia y velocidad de respuesta a la hora de resolver sus requerimientos.